Y sigo con esto de construirte tu propio blog.
En
las entradas anteriores ya os he contado cómo me decidí a tener un blog de autor
después de haber coqueteado con varios más genéricos. Y también he explicado todas las dudas que me surgieron sobre si tenía tiempo para escribir y también sobre las cosas de las que me apetecía hablar.
En un primer momento y si
no quieres invertir –dinero- en él (porque tiempo le vas a dedicar, quieras o
no) tienes muchas posibilidades pero en realidad la mayoría de nosotros
acabamos entrando en alguno de estos dos sistemas de gestión de contenidos:
wordpress o blogger.
Yo he probado con los dos
y opino que wordpress es “más bonito” pero con blogger me siento más cómoda a
la hora de trabajar; así que en las últimas ocasiones me he decidido por este
segundo.
Una vez elegido el
dominio en el que vas a trabajar las herramientas nos las ponen ellos y son
bastante fáciles de utilizar. Fáciles nivel escritora novata: ¡¡pensad que lo estoy haciendo hasta yo que para esto de la tecnología son un auténtico zote!. El asunto es entrar "Crear blog", ponerle título y empezar con las plantillas básicas. Pero, en nada seguro que estás enredando para colgar tus propias fotos, para personalizar los colores, cambiar las plantillas, letras y todas las demás cosas que un blog nos permite hacer. Es sencillo. Muy sencillo. Solo necesitas dos cosas: enredar por las tripas de tu blog y tiempo. Mucho tiempo. Más adelante ya será todo más sencillo y, sobre todo más rápido.
En realidad, es solo
cuestión de ir cogiendo confianza.
Lo cierto es que nada más
abrirlo puedes colgar en línea tu primera entrada. O explicar por qué has
abierto el blog. O arrancar con algo nuevo. A mí esto me encanta porque te da
el subidón ese de estar creando algo sin saber si va a tener mucho o poco
recorrido. Y construir siempre es una interesante experiencia.
En la wikipedia puedes leer las bases de todo esto si te decides a empezar con Blogger, como hago yo, pero, sinceramente, creo que la mejor manera que tienes de avanzar es entrando directamente en BLOGGER y empezar a jugar.
Porque, una ultima cosa,
y yo creo que una de las más importantes, al menos para mi gusto:
Es importante empezar a
escribir ese blog que te va a acompañar durante mucho tiempo ya. Pero YA. Posiblemente ahora mismo que ni siquiera sabes para qué.
Muchas veces queremos hacer las cosas perfectas y esa es, al final, la razón de
que no nos atrevamos a hacerlas. En realidad, lo importante es ir avanzando y
en ese camino de pruebas y errores irás descubriendo hacia donde quieres ir.
Si, lo sé, parece un poco
absurdo, pero creo que es importante. Empezar. No ir postponiéndolo indefinidamente. En
realidad, excepto un poco de tiempo, no tienes mucho que perder. Si la cosa
no va a ningún sitio, al menos te servirá de aprendizaje y eso ya es bastante.
Llevo pocos días familiarizándome con este blog. 5 entradas nada más. Y no te creas que no me he preguntado algunas veces si esto merece la pena. Me planto delante del teclado y pienso que posiblemente
debería ser más concreta, o plantear las herramientas más tecnológicas. Cosas
tipo:
-Entras en blogger.com y
pinchas en crear un nuevo blog.
-Te saltará una ventana
en la que te pedirán que introduzcas el título.
-La dirección que quieres
reservar para ti (por ejemplo la mía es idoiasaraleguiescritora.blogspot.com)
-Eliges la plantilla
(sencilla, eterea, dinámica o la que más rabia te dé)
-Y ya puedes empezar a
escribir.
En realidad sé que sois
inteligentes. Mucho. Y que con solo tener el enlace donde empezar vuestra propia aventura vais a encontrar estos sencillos pasos sin necesidad de que yo los disecciones como si fuera Jack el Destripador. Que yo lo único que os tengo que contar
es que existe esa posibilidad y cual ha sido mi experiencia. Y si tenéis alguna duda concreta, ya os pondréis en contacto conmigo.
Para el resto simplemente
os invito a experimentar. No os cortéis. Hacedlo. Los blogs cambian la vida.
Más aún que las redes sociales. Simplemente es magia: tú tienes el impulso de
escribir algo. Lo haces y le das al botón naranja de publicar. De pronto, eso
que has escrito, de manera inmediata sale al mundo y lo puedes
compartir en grupos, en las redes, llegar a tus contactos, la gente lo puede
comentar y, además, de algún modo, te libera.
Son todo ventajas. Como
veis, soy fan de esta herramienta. Seguiremos jugando con ella.
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